Trébol de 4 hojas

Cada día paso junto a campos llenos de tréboles como alfombras de un verde brillante.

Al verlos me recuerdan cuando era pequeño y pasaba tiempo en el campo junto a mis padres.

Pasaba, con la ilusión de un niño, horas buscando un trébol de cuatro hojas, hasta que lo encontraba y lo arrancaba e iba corriendo hasta mi padre y le decía: "Mira he encontrado un trébol de cuatro hojas! Tendré suerte!"

Es curioso las cosas que recuerdas años mas tarde.

Mi padre entonces me decía
: "¿Ves? ¿Qué has aprendido? La gente te dirá que la suerte se tiene o no se tiene, pero la suerte es para quienes se esmeran e invierten su tiempo en encontrarla."

Así es, la suerte, al igual que la felicidad, es de aquellos que la buscan.

Hay quienes se quedan sentados esperando que les llegue. Otros que pasan caminando por esos campos de tréboles sin mirar a su alrededor. Y por último están esos, los que la buscan hasta encontrarla.

(Antonio González)